Un ataque israelí contra el Hospital Bautista de Ciudad de Gaza el 5 de junio de 2025 provocó la muerte de al menos cuatro periodistas locales y resultó herido un quinto, en medio de una operación simultánea para recuperar cadáveres de rehenes.
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En horas de la mañana del jueves 5 de junio, un proyectil impactó en las instalaciones del Hospital Bautista de Ciudad de Gaza, donde se encontraban presentes equipos de prensa cubriendo la situación humanitaria en la zona norte del enclave. Según la agencia Wafa y confirmó la agencia EFE, el bombardeo causó el deceso de cuatro periodistas locales y dejó a otro reportero en estado grave.
Este ataque se produjo de manera simultánea a una operación militar nocturna del Ejército israelí, la cual tenía como propósito la recuperación de los cuerpos de dos rehenes liberados en días anteriores. La acción fue coordinada con el Shin Bet, el Servicio de Seguridad Interior de Israel. Fuentes oficiales israelíes indicaron que habían identificado al Hospital Bautista como un posible punto de convergencia de milicianos, aunque hasta el momento no se han presentado pruebas concluyentes que justifiquen el impacto directo en el centro de salud.
La respuesta internacional no se hizo esperar: organizaciones de derechos humanos y organismos multilaterales emitieron declaraciones condenando el ataque, que agrava la ya tensa situación humanitaria en el norte de Gaza. El Ministerio de Salud palestino calificó el hecho de “inaceptable” e instó a la comunidad internacional a tomar medidas para proteger a los civiles y a los trabajadores de prensa, considerados “objetivos protegidos” según el derecho internacional humanitario.
Asimismo, grupos de periodistas independientes manifestaron su preocupación por el creciente riesgo que enfrentan los reporteros en la Franja de Gaza, señalando que el bombardeo al Hospital Bautista representa un punto de inflexión en la práctica de la cobertura informativa en zonas de conflicto. Se teme que la escalada de enfrentamientos derive en nuevas restricciones para el acceso de la prensa, limitando la transparencia y la visibilidad de la crisis humanitaria.
Créditos/Fuente: swissinfo.ch
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